Durante aproximadamente seis años y medio, Wilder Castro fue concejal del municipio de La Ceja, donde sirvió de manera desinteresada a toda la comunidad.
Su trayectoria en la política inició en el año 2016, cuando logró ser el único corporado del Partido Liberal con 403 votos, lo cual generó sorpresa debido a que en aquel entonces aspiraban cuatro exconcejales por el mismo partido y, entre el campo político, Wilder tenía poco reconocimiento.
Entérese: Por primera vez en estas elecciones, Gustavo Petro pierde una encuesta
Posteriormente, para su segunda aspiración, Castro superó los mil votos (1.090), y gracias a su buena gestión fue reconocido por la Gobernación de Antioquia como concejal destacado del departamento durante el año 2021.
Wilder es licenciado en Educación Física, Recreación y Deportes (UdeA), especialista en Alta Gerencia (UdeM) y también tiene un diplomado en innovación en el sector público (ESAP).
Cuando adelantaba sus estudios universitarios se desempeñó manejando el taxi de su padre en las noches para poder cumplir su sueño de ser profesional. Tras lograrlo, se enfocó en programas sociales como la atención de niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad (Fundación Maná), el programa de rehabilitación en adicciones (Clínica San Juan De Dios), la población vulnerable y con patologías psiquiátricas (Clínica del Oriente), el programa de reeducación para adolescentes infractores (caminos de libertad) y fue promotor deportivo en zona rural (Incerde).
Precisamente, en el Concejo Municipal se ha destacado por sus iniciativas de apoyo al sector deportivo, siendo autor del programa de subsidio de transporte para deportistas de proyección y coautor de la estampilla pro deporte para aumentar el presupuesto deportivo del municipio; además, ha sido defensor de los principales proyectos de infraestructura deportiva.
En otras noticias: ¡Cuidado! La modalidad que estarían utilizando falsos policías para cometer delitos en el Oriente
Es de resaltar que Wilder Castro también ha liderado iniciativas sociales como el primer torneo callejero “Copa de la Paz”, grupo de voluntariado para mejoramientos de vivienda en zona rural y actividades masivas deportivas con sentido social para apoyar la población carcelaria, el albergue municipal, fundaciones y corporaciones y el asilo del adulto mayor.
Luego de sumar una importante experiencia como concejal, Wilder tomó la decisión de renunciar, según dice, no porque desaparezca el deseo de continuar sirviendo, sino que, por el contrario, “son decisiones difíciles de tomar, pero necesarias para poder continuar en la senda de servir al municipio desde otros campos, pero con mayor convicción”.